Foto: Invasión de creyentes en Tomsk (2018)
En el territorio de Krasnoyarsk, una mujer de 77 años fue objeto de una incursión armada por parte de las fuerzas de seguridad debido a la religión de su nieto
Territorio de KrasnoyarskEl 2 de agosto de 2019, en la aldea de Nikolaevka (territorio de Krasnoyarsk), fuerzas de seguridad enmascaradas y a prueba de balas irrumpieron en la casa de Lyubov Mirenyuk, de 77 años, cuando estaba sola en su casa y exigieron que se le entregaran todos los dispositivos electrónicos disponibles. La razón es la religión de su nieto.
La orden de registro fue firmada por el juez del Tribunal de Distrito de Leninsky de Krasnoyarsk, Artem Ginter. La única razón para tales acciones fue que su nieto, que profesa la religión de los testigos de Jehová, estaba registrado en la casa de la mujer. La propia Lyubov Mirenyuk no comparte esta fe. Los acontecimientos posteriores se convirtieron en una verdadera pesadilla para una anciana. Por la tarde, hombres armados saltaron la valla, irrumpieron en la casa e iniciaron el registro sin identificarse ni mostrar ningún documento. Amenazaron con una larga pena de prisión para su nieto, diciendo que ya se había abierto un caso penal contra él bajo el artículo "extremismo". Lyubov se negó a creerlo, sabiendo que su nieto era una persona decente y respetuosa de la ley.
Lyubov Mirenyuk tiene mala salud y no ha salido durante mucho tiempo, se mueve por la casa con gran dificultad. Estaba muy asustada por el comportamiento de los hombres armados y enmascarados. Debido al estrés resultante, el jubilado tenía una presión arterial peligrosamente alta. No recibió ningún protocolo por parte de las autoridades.
El registro fue sancionado como parte de un caso penal contra Andrey Stupnikov, que ha estado en curso desde el 3 de julio de 2018. Se le acusa de "organizar las actividades de una organización extremista" (parte 1 del artículo 282.2 del Código Penal de la Federación de Rusia) por la única razón de profesar las opiniones religiosas de los testigos de Jehová.