En Altái, en dos ciudades, los testigos de Jehová están siendo registrados, hay detenidos
Territorio de AltáiDesde la mañana del 27 de mayo de 2021, los guardias de seguridad han estado registrando las casas de los testigos de Jehová en Barnaul, la capital del territorio de Altái, y Rubtsovsk, a unos 300 km de distancia. Al menos ocho personas están detenidas para ser interrogadas. Según datos preliminares, se ha abierto una causa penal contra un creyente de 24 años.
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Se ha sabido que se llevaron a cabo registros y detenciones en masa en las ciudades de Barnaul, Zarinsk y Rubtsovsk, el asentamiento de Telmenka y las aldeas de Troitskoye y Shakhi durante una operación especial de la policía denominada "Armagedón". Los creyentes denunciaron el uso de la fuerza física por parte de las fuerzas de seguridad. Al menos 17 personas fueron llevadas para ser interrogadas a la UVS y al Centro de Lucha contra el Extremismo. Ekaterina Popova, jueza del Tribunal de Distrito de Oktyabrsky de Barnaul, emitió una orden de registro en Barnaul y otros cuatro lugares. El comandante de la policía Yaroslav Medvedev fue uno de los líderes de la operación.
A las 6 de la mañana, las fuerzas del orden irrumpieron en las casas de los testigos de Jehová. Se les incautaron dispositivos electrónicos, soportes de datos, literatura bíblica, libros y registros personales. En algunos casos, los agentes de la ley derribaron las puertas y obligaron a los creyentes a acostarse en el suelo. Durante los interrogatorios hubo presión psicológica. Los investigadores hicieron preguntas: "¿Cuánto tiempo ha estado leyendo la Biblia? ¿Qué está escrito allí? ¿Es Jesús el hijo de Dios? ¿Cuánto tiempo hace que usted es miembro de la "secta" de los testigos de Jehová? ¿Has participado en conferencias de Zoom? ¿Cómo se predica? ¿Cómo asistes a las reuniones?" Los creyentes utilizaron el artículo 51 de la Constitución rusa.
La operación especial se llevó a cabo dentro de la causa penal que se inició el 11 de mayo de 2021 contra Pavel Kazadaev, de 24 años, residente de Novokuznetsk. El investigador principal Evgeny Kozuchenko vio en las acciones del joven signos de un delito en virtud de la parte 2 de la cláusula 282.2 del Código Penal de la Federación de Rusia (participación en actividades de organizaciones extremistas). Pavel y su esposa fueron detenidos y llevados a Barnaul, a 350 kilómetros de su casa. El creyente fue puesto bajo custodia. Al día siguiente, un investigador solicitó al tribunal que se eligiera una medida de restricción para Pavel en forma de arresto domiciliario. Como resultado, fue puesto en libertad bajo palabra para que no se fuera.
Los agentes encargados de hacer cumplir la ley también registraron el lugar de registro de Pavel Kazadaev en la aldea de Lugovoi, donde viven sus familiares. Presentándose como policías, los agentes de operaciones y la policía antidisturbios OMON entraron en la casa. También registraron el garaje, el automóvil, la casa de baños y el patio. Debido al estrés, la anciana tuvo que llamar a una ambulancia.
Otras cuatro familias de testigos de Jehová fueron registradas e interrogadas en Rubtsovsk. A uno de los fieles le hackearon su cuaderno y su teléfono celular y luego los confiscaron en su presencia. Según él, los agentes también se llevaron sus ahorros personales de 100.000 rublos.
El krai de Altái se ha convertido en la 66ª región de Rusia en la que los organismos encargados de hacer cumplir la ley procesan a los testigos de Jehová. Los funcionarios de seguridad consideran que las reuniones conjuntas de creyentes para leer y discutir la Biblia, así como las conversaciones sobre Dios, son actividades de una organización extremista, aunque ningún tribunal ruso ha prohibido la religión de los testigos de Jehová, y las autoridades han hecho hincapié en que los creyentes pueden reunirse para el culto colectivo.