En Primorie, Valery Vyaznikov, un minero jubilado, fue suspendido por su fe en Jehová Dios

El 7 de noviembre de 2023, Nina Kalashnik, jueza del Tribunal de Distrito de Pozharsky del Territorio de Primorie, declaró culpable a Valeriy Vyaznikov de participar en actividades extremistas: así se interpreta la confesión de fe en Jehová. Un creyente pacífico de 59 años de la aldea de Chegdomyn fue sentenciado a 2 años y 6 meses de sentencia suspendida.

"Mi conciencia está tranquila ante Dios, ante el pueblo y el tribunal. Es por el hecho de que estoy tratando de transmitir verdades que salvan vidas de la Palabra de Dios que ahora estoy siendo juzgado", dijo el creyente en su última palabra. Aunque no hay víctimas ni hechos de acciones extremistas en el caso, el fiscal pidió condenar a Vyaznikov a 3 años condicionalmente con restricción de libertad durante 1 año. El veredicto puede ser apelado.

El Departamento de Investigación de Dalnerechensk de la Dirección de Investigación del Comité de Investigación del Territorio de Primorsky abrió un caso penal contra Valery Vyaznikov en julio de 2021, casi 1,5 años después llegó a los tribunales de Luchegorsk, ubicado a más de 1000 kilómetros del lugar de residencia del creyente. La acusación se basaba en grabaciones de conversaciones sobre temas bíblicos entre informantes-operativos y creyentes. A Vyaznikov se le permitió participar en la mayoría de las audiencias por videoconferencia desde el juzgado local en el pueblo de Chegdomyn.

Desde diciembre de 2022, Vyaznikov, padre de cuatro hijos (dos de ellos menores de edad), está bajo acuerdo de reconocimiento. Hablando de las dificultades asociadas con la persecución, Valeriy dice: "Lo más difícil fue enterarme de que me habían puesto en la lista de buscados en ausencia, y luego recibir una citación. El mensaje y la expectativa de algo desagradable siempre pesan en el corazón. Mi esposa y mis hijos estaban muy preocupados". El creyente tiene problemas de salud, durante el proceso penal fue sometido a una cirugía.

En total, 58 testigos de Jehová están siendo procesados por cargos similares en el territorio de Primorie. Las sentencias condenatorias para 25 de ellos ya han entrado en vigor, tres están cumpliendo condenas en colonias penales.

Tal número de casos criminales por la fe en la región es desconcertante para los activistas de derechos humanos rusos y extranjeros. Willy Fautré, fundador y director de la organización Derechos Humanos Sin Fronteras, con sede en Bruselas, dijo: "Los testigos de Jehová son el grupo religioso más perseguido en Rusia desde su prohibición en 2017, por lo que se les priva de la libertad de comunicación, reunión, culto y predicación. Las estadísticas sobre la magnitud de la represión son alarmantes. La libertad de religión o de creencias es la piedra angular de todas las libertades".